viernes, 6 de abril de 2007

Lo que aprendí

(imagen: Pintura "El anciano de los dias" de William Blake- 1794)

El día florece acompañado de un sinfín de sorpresas que rebasan mi matutino vaso de leche, aventuras llenas de imborrables hazañas y épicas derrotas, motivos que derrochan pasión con nobleza y me dan energía para vivir, lecciones de vida recitadas con calidez para mis estimulados sentidos.

Desaparecen mis miedos e inseguridades al no ser juzgado de un plumazo, mostrando a todos lo que llevo en mi interior, en sintonía siempre con mis Dudas, enriqueciendo mi destino de expresiones, de sueños, de colores vivos. Huyo de lecturas entre líneas planeando entre palabras de aliento y franqueza. Los ojos en los que me reflejo son cordiales y amables, su expresión y su voz no solo revelan interés por comprender sino que desean conmoverse con mi sentir, necesitan palpar mi corazón y padecer mi dolor.

Con las espaldas cubiertas por mis aliados y el desahogo entre mis camaradas, derrumbo espigados muros con solo soplarles, convierto enemigos en espejismos de lejanos lugares que no alcanzo ni a ver, trepo prominentes montañas sin sacrificio ni esfuerzo, venzo a mis viejos y gastados fantasmas aligerando carga para continuar mi senda. Nunca para mi fue un dilema el escoger el camino correcto, porque se que perdonar es de sabios, que equivocarse es de humanos, que caer es de valientes, que esperar es de cobardes.

Y el día concluye con la conciencia tranquila, el viaje avanzado, el bolsillo rebosando amor y la vida deseando ver de nuevo el Sol. Lo que aprendí hoy sin duda me servirá mañana.


0 comentarios:

Gero. Con la tecnología de Blogger.

Translate

Entradas populares