domingo, 6 de noviembre de 2011

Su Ta Gar

sábado, 5 de noviembre de 2011

El mañana, ahora, es cosa del pasado

(imagen: Millenium Watchman, Vladimir Kush)

Somos incapaces de saborear el instante ya que nuestro alrededor gira a una velocidad vertiginosa mientras la mente se colapsa con un bombardeo indiscriminado de información. Perdemos tiempo y empeño en coleccionar olores y colores inservibles, sonidos y sensaciones innecesarias, pensando equivocadamente en que tarde o temprano pueden hacernos falta. Pero nunca tenemos espacio para disfrutarlas porque seguimos clasificando, organizando y filtrando para el mañana. Así que intentaré fijar mis sentidos en la trayectoría, esquivando distracciones y solo exprimiendo lo justo y necesario para el viaje, consiguiendo así mantener mi carga siempre ligera, mi mente abierta y mis pulmones llenos y rebosantes de aire.

Mi sacrificio, brío y ánimo deberán conjugarse siempre en presente para que mis ojos brillen dichosos y satisfechos al recibir el futuro, prohibiendo racionar el esfuerzo o guardar en la recámara del olvido impulsos e instintos. Es imposible planificar la felicidad, ni administrarla y ni siquiera se refleja en una bola de cristal así que tenemos que estar atentos y atrapar ese instante fugaz haciéndolo accesible, afinar el oido para escuchar el leve suspiro que desprende y saborear la brisa fresca y efusiva que se desata. 

Para mi, el mañana, ahora, es cosa del pasado.
Gero. Con la tecnología de Blogger.

Translate

Entradas populares